Edgar Cayce (1877–1945) es una de las figuras más enigmáticas e influyentes del siglo XX en el ámbito de la espiritualidad y los fenómenos psíquicos. Conocido como el "profeta durmiente", Cayce es famoso por sus miles de lecturas psíquicas sobre temas que abarcan desde la sanación espiritual hasta la historia antigua. Entre sus contribuciones más intrigantes están sus numerosas lecturas sobre la Atlántida, que han cautivado a generaciones de investigadores, místicos y curiosos.
¿Quién era Edgar Cayce?
Nacido en una familia modesta en Kentucky, Edgar Cayce mostró habilidades psíquicas desde temprana edad, como la capacidad de memorizar libros durmiendo sobre ellos. Sin embargo, fue en su adultez cuando desarrolló plenamente su talento como médium. Durante sus sesiones, entraba en un profundo estado de trance, de ahí su apodo "el profeta durmiente", y respondía a preguntas sobre una amplia variedad de temas. Si bien gran parte de su trabajo se centró en la salud física y emocional, también profundizó en temas metafísicos e históricos, incluida la Atlántida.
Cayce no tenía formación médica formal, pero sus lecturas a menudo proporcionaban diagnósticos y remedios que resultaban efectivos para muchas personas. Creía que sus respuestas provenían de una fuente espiritual superior, accesible a través de su estado de trance.
La Atlántida: ¿Mito o realidad?
La Atlántida es una civilización legendaria mencionada por primera vez por el filósofo griego Platón en sus diálogos Timeo y Critias. Según Platón, la Atlántida era una gran isla o continente que existió aproximadamente 9,000 años antes de su tiempo. Era una sociedad altamente avanzada tanto tecnológica como espiritualmente, pero finalmente se hundió en el mar tras caer en la decadencia moral y el conflicto.
Desde la época de Platón, la idea de la Atlántida ha fascinado a filósofos, científicos, escritores y exploradores. Muchos investigadores modernos consideran la Atlántida como una alegoría o ficción. Sin embargo, algunos creen que esta civilización existió realmente y pudo haberse ubicado en lugares como el Mediterráneo, el Caribe o cerca de la Antártida.
Las lecturas de Cayce sobre la Atlántida
A través de sus lecturas, Edgar Cayce proporcionó muchos detalles sobre la Atlántida, agregando capas fascinantes al mito. Describía esta civilización como tecnológicamente avanzada, con un profundo conocimiento de las ciencias y los poderes espirituales. Según Cayce, la Atlántida existió entre 200,000 y 10,000 a.C. y fue un inmenso continente ubicado en el océano Atlántico, entre Europa y América.
Las lecturas de Cayce sugieren que la Atlántida atravesó varios periodos de destrucción. La primera ocurrió hace unos 50,000 años, causada por el mal uso de una tecnología poderosa, particularmente cristales capaces de concentrar energía. Otra catástrofe ocurrió alrededor del 12,000 a.C., lo que condujo al colapso final y al hundimiento del continente.
La historia espiritual de la Atlántida
Para Cayce, la Atlántida no era solo una sociedad tecnológicamente avanzada, sino también espiritualmente evolucionada. Los habitantes de la Atlántida poseían un profundo conocimiento de las leyes cósmicas y de la energía universal. Sin embargo, Cayce advirtió que la Atlántida también sufrió una división moral. Una parte de la población, llamada los "Hijos de Belial", estaba motivada por el poder y la ambición material, mientras que la otra parte, los "Hijos de la Ley del Uno", vivía en armonía con las fuerzas espirituales del universo. Este conflicto eventualmente llevó al colapso de su sociedad.
La tecnología de la Atlántida
Uno de los aspectos más controvertidos de las lecturas de Cayce es su descripción de la tecnología atlante. Afirmaba que la Atlántida había desarrollado una fuente de energía basada en grandes cristales que capturaban la energía solar y cósmica. Esta tecnología no solo proporcionaba energía para las necesidades diarias, sino que también les permitía mover grandes objetos y controlar las fuerzas de la naturaleza.
Algunas de sus descripciones más detalladas mencionan "máquinas voladoras" y vehículos capaces de viajar por el aire y el agua, utilizando esta misteriosa fuente de energía cristalina. Algunos ven paralelismos entre estas descripciones y teorías modernas sobre energía libre o fenómenos OVNI.
Las reencarnaciones atlantes
Un concepto central en la filosofía de Cayce es la reencarnación. Según él, muchas almas humanas modernas habrían vivido vidas anteriores en la Atlántida. En sus lecturas, Cayce identificaba a menudo a las personas con las que trabajaba como antiguos atlantes en vidas pasadas. Algunos incluso habrían jugado papeles importantes en la caída de esta civilización. Estas lecturas han llevado a la creencia de que algunos de los desafíos que enfrenta la humanidad moderna podrían estar relacionados con lecciones no aprendidas de la caída de la Atlántida.
Cayce también predijo que surgirían pruebas físicas de la existencia de la Atlántida en el siglo XX, particularmente en las Bahamas, donde estructuras sumergidas podrían pertenecer a esta civilización perdida. En 1968, el descubrimiento de lo que algunos creen que es una carretera sumergida cerca de Bimini fue visto como una validación de esta predicción, aunque los geólogos modernos generalmente atribuyen estas formaciones a causas naturales.
El legado de las lecturas de Cayce sobre la Atlántida
Las lecturas de Cayce sobre la Atlántida continúan influyendo en los círculos esotéricos y espirituales. Sus afirmaciones han inspirado numerosos libros, investigaciones y especulaciones sobre la existencia de una civilización perdida y tecnológicamente avanzada. Si bien las pruebas arqueológicas de la Atlántida siguen siendo escasas, los relatos de Cayce siguen cautivando y alimentando las discusiones sobre los orígenes de la humanidad, la naturaleza de la conciencia y los ciclos de la historia.
Para algunos, Cayce ofrece una visión espiritual y esotérica de la Atlántida que trasciende los límites de la ciencia convencional. Para otros, sigue siendo un mistificador, un hombre que articuló un mito antiguo de manera que correspondía a las aspiraciones espirituales de su época.
Conclusión
A través de las lecturas de Edgar Cayce, la Atlántida se convierte en algo más que un simple mito. Se convierte en una poderosa alegoría de los desafíos de la humanidad, de sus luchas entre el materialismo y la espiritualidad, entre el ego y el alma. Ya sea que la Atlántida haya existido realmente o no, las enseñanzas de Cayce nos recuerdan la importancia de la armonía con las fuerzas universales y las lecciones del pasado, tanto a nivel individual como colectivo.
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