François Schlatter, a menudo llamado "El Profeta de las 100,000 Curaciones", es una figura enigmática de finales del siglo XIX cuya vida y acciones dejaron una huella duradera en la cultura estadounidense, especialmente en el estado de Colorado. Su historia está marcada por una intensa búsqueda espiritual, numerosos relatos de curaciones milagrosas y una desaparición misteriosa que ha alimentado las leyendas en torno a su persona.
1. Los orígenes de François Schlatter
François Schlatter nació el 29 de abril de 1856 en el pequeño pueblo de Ebersheim, en Alsacia, Francia. De origen humilde, Schlatter creció en un entorno rural donde la fe católica jugaba un papel importante. Se sabe poco sobre sus primeros años, salvo que trabajaba como zapatero, un oficio modesto que no auguraba el destino extraordinario que le aguardaba.
En 1884, Schlatter emigró a Estados Unidos, siguiendo el camino de muchos alsacianos que abandonaron Europa por razones económicas y políticas. A su llegada, continuó trabajando como zapatero en varias ciudades estadounidenses, incluida Denver, Colorado. Fue en esta época cuando su vida dio un giro decisivo, marcado por experiencias místicas y espirituales.
2. El llamado espiritual y la misión divina
En 1893, Schlatter comenzó a tener visiones y a sentir un profundo llamado espiritual. Según sus propios relatos, escuchó la voz de Dios que le daba la misión de sanar a los enfermos y predicar la fe. Convencido de que debía obedecer este llamado divino, Schlatter emprendió una peregrinación a pie, cruzando varios estados del oeste de los Estados Unidos. Durante dos años, caminó miles de kilómetros descalzo y vestido con una simple túnica, viviendo de la caridad de la gente que encontraba en el camino. Afirmaba que esta austeridad era necesaria para cumplir su misión y acercarse más a Dios.
Durante este período, rápidamente se hizo famoso por sus poderes de sanación. Personas de todo el país comenzaron a acudir a ver al hombre que ahora era conocido como "El Profeta". Schlatter supuestamente curó a cientos, e incluso miles de personas que sufrían de diversas afecciones: parálisis, enfermedades crónicas, ceguera, entre otras. Rechazaba sistemáticamente cualquier forma de pago, afirmando que sus dones le habían sido concedidos por Dios y que debían ser ejercidos gratuitamente.
3. Las curaciones milagrosas y la fama en Denver
En 1895, Schlatter llegó a Denver, Colorado, donde temporalmente instaló su campamento en la casa de un hombre llamado Sr. Fox, en Edgewater. Allí se convirtió en una verdadera sensación. Todos los días, miles de personas se congregaban para verlo, con la esperanza de recibir una curación milagrosa. La prensa local cubría ampliamente sus actividades, y los relatos de curaciones espectaculares comenzaron a difundirse por todo el país. Schlatter pronto recibió el apodo de "El Profeta de las 100,000 Curaciones", un título que reflejaba la magnitud de su influencia.
Los testimonios de la época describen largas filas de personas enfermas que acudían para ser tocadas por Schlatter. Su enfoque era simple: sostenía la mano de los enfermos, rezaba en silencio y les decía que se marcharan en paz. Muchas personas afirmaron haber sido sanadas inmediatamente después de este contacto. A pesar del escepticismo de la Iglesia Católica y las autoridades médicas locales, las historias de curaciones milagrosas continuaban atrayendo a multitudes impresionantes.
4. Controversias y críticas
Aunque venerado por sus seguidores, Schlatter no estaba exento de detractores. Algunos lo acusaban de ser un impostor o un charlatán. La Iglesia Católica, en particular, veía con recelo a este hombre que sanaba sin ninguna afiliación eclesiástica, a pesar de que él se proclamaba como un devoto cristiano. Las autoridades médicas también eran escépticas y pedían pruebas más científicas de sus supuestos milagros.
A pesar de las críticas, Schlatter permanecía firme en su fe y en su misión. No buscaba ni reconocimiento ni fortuna, y continuaba predicando la simplicidad y el amor de Dios.
5. La misteriosa desaparición de Schlatter
En noviembre de 1895, cuando su popularidad alcanzaba su punto máximo en Denver, Schlatter desapareció repentinamente sin dejar rastro. Dejó una simple nota a sus anfitriones, diciendo que había cumplido su misión y que Dios lo llamaba a otro lugar. Esta desaparición repentina alimentó numerosas teorías; algunos creían que había vuelto a una vida errante, mientras que otros pensaban que había sido secuestrado o incluso asesinado. En los años siguientes, circularon rumores de que Schlatter había sido visto en varias regiones del oeste de los Estados Unidos, pero ninguno fue confirmado.
6. El legado de François Schlatter
La historia de François Schlatter sigue envuelta en misterio, y su verdadero impacto sigue siendo objeto de debate. Lo que es seguro es que su paso dejó una huella indeleble en el imaginario colectivo de los Estados Unidos de finales del siglo XIX. Su nombre todavía se menciona en las leyendas locales de Colorado, y algunos continúan creyendo que realmente poseía un don divino.
El legado de Schlatter también se refleja en los innumerables relatos de curación y fe que sus discípulos y las personas que conoció han transmitido. Algunos escritos de la época, incluido su propio diario de viaje, dan testimonio de la profundidad de su fe y su visión mística del mundo.
Schlatter sigue siendo un ejemplo fascinante de cómo, en ciertas épocas, la fe, la espiritualidad y el misticismo podían entrelazarse para producir fenómenos sociales tan espectaculares como misteriosos. Su búsqueda de sanación y espiritualidad, sus viajes a pie por los Estados Unidos y su rechazo al reconocimiento o la riqueza lo convierten en una figura tanto enigmática como respetada.
Cesarth15, Public domain, https://en.wikipedia.org/wiki/Francis_Schlatter#/media/File:Francis_Schlatter._%22Treating_in_the_rain%22.tif
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