Durante siglos, la ubicación del Arca de la Alianza —un cofre sagrado que, según la tradición, contenía las tablas originales de los Diez Mandamientos— ha sido uno de los mayores misterios de la historia. Aunque muchos dudan incluso de su existencia, una serie de documentos desclasificados de la CIA en los años 1980 ha reavivado el interés por esta antigua reliquia. Dichos documentos sugieren que el Arca podría haber sido localizada por individuos que participaron en un controvertido programa gubernamental conocido como “visión remota”.
Este programa, parte de una iniciativa de inteligencia durante la Guerra Fría llamada comúnmente "Proyecto Stargate", buscaba explorar y desarrollar la percepción extrasensorial, en particular la clarividencia: la capacidad de percibir objetos o lugares lejanos sin el uso de los sentidos convencionales. Los participantes eran entrenados en técnicas psíquicas con el objetivo de “ver” ubicaciones y eventos inaccesibles por medios normales. Según algunos de estos informes, los videntes remotos afirmaron haber identificado el lugar donde se encuentra el Arca durante una de sus sesiones.
Los relatos bíblicos señalan que el Arca fue construida por los israelitas poco después de su éxodo de Egipto, hacia el siglo XV a.C. Moisés habría colocado dentro del cofre las tablas de piedra grabadas con los Diez Mandamientos, como símbolo y salvaguarda de la alianza entre Dios y su pueblo. Con el tiempo, sin embargo, su rastro se perdió, lo que dio lugar a múltiples teorías sobre su paradero.
Algunas hipótesis la sitúan bajo las ruinas de Jerusalén; otras apuntan a Etiopía, o a ciudades antiguas ocultas bajo las arenas del Medio Oriente. La posibilidad de que haya sido descubierta mediante técnicas psíquicas representa, sin duda, una ruptura con los métodos tradicionales de investigación histórica y arqueológica.
No existe evidencia pública que confirme que el Arca haya sido hallada realmente, y la CIA nunca ha reconocido oficialmente haber recuperado un artefacto de esa naturaleza. Aun así, la sola idea de que una agencia de inteligencia recurriera a métodos paranormales para encontrar uno de los objetos más sagrados de la historia es, cuanto menos, inquietante.
Ya sea realidad, ficción, o algo intermedio, estas afirmaciones aportan una nueva dimensión al enigma persistente del Arca de la Alianza. Si aún existe, puede que esté oculta no solo bajo tierra, sino también tras capas de secreto, custodiada por las mismas instituciones que intentaron descubrirla.
Grok, CC0, https://x.com/
0 comentarios: