El 10 de enero de 1967, un avistamiento misterioso dejó una impresión duradera sobre el lago St. Clair, ubicado en la frontera entre Michigan (EE. UU.) y Ontario (Canadá). Ese día, los hermanos Jaroslaw, dos jóvenes pescadores locales, afirmaron haber sido testigos de un fenómeno inexplicable mientras revisaban sus líneas en las aguas congeladas del lago.
Según su relato, alrededor de las 7 PM, apareció una luz brillante e inusual en el horizonte. Intrigados, los hermanos observaron cómo esta fuente de luz se acercaba rápidamente a su posición. A una distancia de unos 200 metros, pudieron distinguir un objeto metálico con forma de platillo que flotaba silenciosamente sobre la superficie congelada del lago.
El objeto parecía tener unos quince metros de diámetro y emitía una luz azulada pulsante alrededor de su perímetro. Los hermanos Jaroslaw describieron una especie de cúpula transparente en la parte superior de la nave, a través de la cual creyeron ver sombras en movimiento, lo que sugería una presencia en su interior.
Después de unos minutos de una quietud casi perfecta, el platillo volador realizó un ascenso rápido, casi instantáneo, antes de desaparecer en el cielo estrellado. Los testigos no sintieron ningún sonido, vibración ni perturbación en el suelo congelado.
El incidente atrajo rápidamente la atención de los medios locales y fue reportado a las autoridades correspondientes. Sin embargo, a pesar de las investigaciones realizadas por ufólogos y expertos en aeronáutica, no se encontró ninguna explicación satisfactoria. Algunos escépticos sugirieron la posibilidad de un prototipo militar secreto, mientras que otros continúan creyendo que se trató de una visita extraterrestre genuina.
Sentry579, Public domain, https://commons.m.wikimedia.org/wiki/File:Jaroslaw_UFO.jpg
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